Descubre cómo mejorar tu autocontrol emocional

Tener la capacidad de gestionar tus emociones influye de manera muy positiva en tu estado de ánimo, en tus relaciones personales y en tu nivel de vitalidad. Cuando hablamos de autogestión o autocontrol emocional, no nos referimos a tener que esconder o avergonzarnos de nuestras emociones, sino a todo lo contrario. Conocernos a nosotros mismos y aprender cómo reaccionamos a los estímulos es clave para sentirnos más relajados y mantener a raya las preocupaciones.

El autocontrol emocional es un mecanismo que nos permite canalizar nuestros sentimientos, ya sean positivos o negativos. El primer paso consiste en entender que la vida está llena de altibajos, y que en ocasiones nos sentiremos mejor y en otras peor. Después nos toca recorrer un camino en el que nos veremos expuestos a un sinfín de sensaciones, cuyas causas y consecuencias debemos identificar para que eso nos ayude a encajarlas y expresarlas sin temor.

Las emociones son una parte importante de nuestra vida, y por eso es fundamental aprender a convivir con ellas. Como sabemos que este es un mundo complejo y exigente, hemos decidido tenderte la mano y te regalamos un ebook lleno de consejos. Descárgate esta guía, empieza a aplicarlos y alcanza ese equilibrio que te llenará de vitalidad:

Si desarrollas la habilidad de gestionar tus emociones, contarás con diversas ventajas en tu vida personal y profesional, así que el esfuerzo merece la pena. Sigue leyendo si quieres conocer los principales beneficios del autocontrol emocional y varias técnicas que te ayudarán a desarrollarlo. El desafío no es fácil, pero ten en cuenta que no lo afrontas en solitario. A tu alrededor hay mucha gente dispuesta a acompañarte, ¡y estamos aquí para apoyarte!

6 beneficios asociados al autocontrol emocional

• Afrontarás determinadas situaciones con mayor eficacia.
• Podrás tomar mejores decisiones.
• Te resultará más sencillo mantener la calma en momentos de conflicto.
• Estarás más capacitado para ordenar tus pensamientos.
• Tus relaciones con otras personas se verán fortalecidas.
• Potenciarás tu autoestima.

6 técnicas que te ayudarán a gestionar tus emociones

1. Escribe un diario

Esta propuesta es tan simple como efectiva. Si lo prefieres, puedes hacerlo en un soporte digital como un móvil o una Tablet, pero la pausa de escribir a mano es un punto a favor. Tómate tu tiempo y plasma tus emociones sobre papel, y anota también qué las provocó y cómo te sentiste después. Cuando acabes, una lectura rápida bastará para que vayas tomando conciencia de cómo te sientes y qué estímulos te hacen reaccionar.

2. Practica mindfulness

Esta técnica de meditación te facilitará mucho la tarea de analizar qué estás sintiendo. Su objetivo es que conectes contigo mismo, centrándote en el aquí y el ahora, para conocer tus pensamientos y emociones. Pero no hace falta que valores si son positivos o negativos, ya que, de nuevo, simplemente se trata de identificar qué es lo que sientes.

3. Prueba la relajación muscular

Existe una gran variedad de técnicas de relajación, y también actividades que pueden ayudarte a ello, pero la clave siempre es la misma. Lo físico, lo mental y lo emocional están conectados, así que aprovecha tu cuerpo y tu mente para encontrar el equilibrio que necesitas.

Por ejemplo, puedes realizar sencillos ejercicios musculares de secuencias de tensión-distensión para relajar las zonas en las que más tensión acumulas, como la espalda o las cervicales. Si necesitas algunas recomendaciones para esos momentos en los que te agobian la ansiedad y el estrés, no te pierdas el vídeo de nuestra coach deportiva y experta en vitalidad Sara Carmona:

4. Aprende a respirar

Aunque pienses que es un proceso automático, la respiración tiene más importancia de la que parece. Las técnicas de respiración nos ayudan a gestionar momentos de tensión y a controlar en cierta medida nuestras reacciones. Dedica algunos minutos al día a inspirar profundamente, mantener el aire en tu interior unos segundos y después soltarlo. Cuando lo domines podrás recurrir a esa sensación de calma cuando más la necesites.

5. Intenta cambiar de paradigma

A veces es inevitable que te venga a la cabeza algún pensamiento negativo o que no pares de darle vueltas a una situación que te preocupa. Lo mejor para romper con esta dinámica es dejar de pensar en ello, aunque sea más fácil de decir que de hacer. Una buena opción para conseguirlo es “contraatacar” pensando cosas positivas o que te motiven, y otra es romper radicalmente con lo que estabas haciendo. Si, por ejemplo, estás en casa y no puedes parar de darle vueltas al coco, sal a la calle para dar un paseo.

6. Invierte en momentos de desconexión

En ocasiones, la mejor solución es parar para recobrar fuerzas e intentar desconectar. Como ya te hemos explicado, gestionar tus emociones lleva tiempo y esfuerzo, por lo que no hace falta tener prisa. Si notas que te agobias demasiado, busca pasatiempos agradables. Prepara una comida especial con amigos, sal a cenar, lee un buen libro y recarga las pilas siempre que te haga falta.

El autocontrol emocional es una excelente herramienta para gestionar tus sentimientos, que te permitirá ponerte en sintonía con tu yo interior. Deja que tus emociones fluyan, pero convive con ellas sin que afecten excesivamente a tu día a día. Regístrate en Espacio Vitalidad para encontrar más recursos sobre salud emocional y hábitos saludables.