¿Por qué son necesarios los alimentos con zinc para tu cuerpo?

El zinc es un nutriente esencial para nuestra salud, puesto que participa en varias funciones claves de nuestro organismo. Pese a ser relativamente “desconocido”, es el segundo oligoelemento más abundante en nuestro cuerpo, únicamente por detrás del hierro. Si consumes alimentos con zinc, ayudarás a tu sistema inmunitario y al correcto funcionamiento de los sentidos del gusto y el olfato, y favorecerás la cicatrización de heridas y la división y el crecimiento de tus células. ¿Listo para dar un impulso a tu vitalidad?

Como sucede con otros minerales, la cantidad de zinc que necesitas viene determinada, entre otras cuestiones, por tu edad y tu sexo. La dosis diaria recomendada va aumentando con los años hasta fijarse en 11 miligramos (mg) en los hombres adultos y 8 en las mujeres. Al tratarse de un elemento fundamental para el crecimiento y el desarrollo del organismo, la proporción se eleva hasta los 11-13 mg en mujeres embarazadas o en periodo de lactancia.

No olvides que, si quieres descubrir cómo mantener una alimentación saludable de forma fácil y rápida, puedes descargarte este ebook. Con él obtendrás una guía detallada con recomendaciones nutricionales para tu día a día de nuestra nutricionista y experta en vitalidad, Mireia Porta.

4 beneficios de tomar alimentos con zinc

Ahora ya conoces un poco más sobre las propiedades del zinc y su importancia para tu organismo. Su lista de beneficios es larga, pero incluir alimentos con zinc en tu dieta te proporcionará 4 ventajas principales:

• Estimulas tu sistema inmunitario: El zinc potencia la producción y el funcionamiento de las células inmunitarias. Si te mantienes en la dosis recomendada, además de reforzar tus defensas, podrás aprovechar sus efectos antivirales.

• Curas tus heridas con mayor facilidad: El factor protector del zinc va más allá del sistema inmunitario. No solo blinda los “escudos” de tu cuerpo ante amenazas externas, sino que contribuye a la cicatrización de heridas promoviendo la síntesis de colágeno.

• Reduces las inflamaciones: Algunas de las inflamaciones que padece el organismo están relacionadas con nuestro ADN. En ocasiones, el zinc actúa como modulador de las células y disminuye ciertas proteínas que se encuentran involucradas en los procesos inflamatorios.

• Promueves el rendimiento cognitivo: El zinc facilita el desarrollo de las células del cerebro. Con la proporción adecuada de este mineral, promoverás un mejor rendimiento cognitivo que facilitará tus procesos de aprendizaje.

Si ya te has decidido a llevar el zinc a tu mesa, sigue leyendo, porque comprobarás que no es nada complicado. Los alimentos con zinc son asequibles y fáciles de encontrar, así que solo debes pensar en las recetas que más te gustan. Toma nota… ¡y ve preparando tus ideas! 

5 alimentos con zinc que debes añadir a tu dieta 

1. Ostras

Es el alimento más destacado, de largo, en lo relativo a aportación de zinc. Por cada 100 gramos (g) de ostras, obtendrás 60 mg de este elemento. Lo más habitual es comerlas crudas o con un poco de limón, lo que hará que puedas sacarle el máximo partido a su aportación nutricional. Una alternativa más económica son las almejas, también en lo alto de la lista de crustáceos y moluscos. Sin embargo, la proporción de zinc baja hasta los 7 mg por cada 100 g.

2. Pollo o pavo

Los filetes de pechuga de pollo o pavo son otra gran opción, por su bajo contenido en grasas y riqueza en nutrientes. En este caso, la dosis de zinc se sitúa alrededor de 5 g por cada 100 g, casi la mitad de la cantidad diaria recomendada. Como en el resto de los alimentos con zinc, importa también el método de cocinado, ya que es más saludable decantarse por la plancha en vez de una fritura.

3. Queso

Al tratarse de un alimento bastante calórico, es conveniente moderar su consumo. Pese a ello, existe un sinfín de variedades que puedes probar, y entre ellas están la mozzarella o el parmesano, que son bajos en grasas. Su aportación de zinc ronda los 4 mg por cada 100 g. 

4. Copos de avena

Los copos de avena son un alimento con zinc de lo más versátil, y con una proporción de 3,5 mg por cada 100 g. Se han popularizado en los desayunos, pero también forman parte de postres o snacks. Combínalos con yogur, con un kiwi Zespri™ o con otras frutas o frutos secos, ¡y no te arrepentirás!

5. Semillas de calabaza

Las semillas de calabaza concentran múltiples elementos que protegen nuestra salud. Entre ellos se encuentran el magnesio, el Omega 3, los antioxidantes y, por supuesto, el zinc. Por cada 100 g de estas pepitas obtenemos entre 6 y 7 mg de zinc. Puedes tomarlas como tentempié, pero también en ensaladas o sopas.

Una vez incluyas los alimentos con zinc en tu recetario, ya no los volverás a sacar. En una dieta variada y equilibrada tiene un merecido hueco este mineral, con efectos muy positivos para tu organismo. Regístrate en Espacio Vitalidad para descubrir más consejos sobre cómo impulsar tu vitalidad a través de unos hábitos de alimentación saludables.